Esta semana es la verbena de San Juan y multitud de petardos van a explotar en todos los rincones de Cataluña. Hoy os queremos presentar otro uso que se puede dar a los petardos. Medición del tiempo de reverberación con petardos. Los petardos son fuentes de ruido impulsivo capaces de generar niveles de presión muy elevados y son idóneos para medir el tiempo de reverberación en recintos de elevado volumen como recintos industriales.
Como vimos en artículos anteriores el tiempo de reverberación se define como el tiempo en que tarda una fuente sonora a disminuir su intensidad una millonésima parte, es decir, una caída de 60dB desde que la fuente sonora se ha apagado. Sin embargo, en la práctica es difícil medir una caída de 60dB debido a que la dinámica señal-ruido de fondo no es suficiente. En este caso, se evalúan los tiempos T20/T30. Para el T20 el rango de caída evaluado es de entre 5dB y 25dB respecto al nivel inicial y se extrapola el valor a todo el rango de 60dB, según inidica la norma ISO 3382. En el caso del T30 se utilizan los valores de decrecimiento de entre 5dB y 35dB por debajo del nivel inicial. A continuación se muestra una imagen explicativa.
Si entramos un poco más en el procedimiento de medición del tiempo de reverberación vemos que podemos utilizar dos tipos de fuentes de ruido. Fuentes de ruido interrumpido y fuentes de ruido impulsivo. Según las características del recinto que queramos evaluar podemos escoger un método u otro.
Método del ruido interrumpido
Como fuente de ruido interrumpido podemos utilizar un altavoz dodecaédrico. El tiempo que la fuente debe mantenerse encendida debe ser suficiente para excitar todos los paramentos del recinto y crear un campo acústico estacionario antes de apagar la fuente.
Como ventajas, se trata de un método que tiene más repetitividad que las fuentes de ruido impulsivo y por lo tanto disminuye la incertidumbre de medida. Sin embargo, el nivel de presión sonora que se puede alcanzar con un altavoz es limitado y puede no ser suficiente para excitar recintos de grandes dimensiones.
En dBplus consultores acústicos realizamos estudios acústicos a medida y diseñamos soluciones para reducir el tiempo de reverberación en recintos industriales.
Método del ruido impulsivo
La respuesta impulsiva de un recinto se puede medir directamente utilizando una fuente impulsiva como un disparo de pistola de fogueo, globos o cualquier otra fuente, siempre y cuando el espectro sea lo suficientemente ancho para excitar todas las frecuencias.
Para recintos industriales donde los volúmenes son muy elevados, muchas veces no hay suficiente con fuentes dodecaédricas o pistolas de fogueo. El nivel de presión sonora generado por estas fuentes no es suficientemente elevado para obtener la dinàmica necesaria para el càlculo de T20/T30 y se requieren fuentes que puedan generar altos niveles de presión sonora, como son los petardos.
Para evitar dañar el suelo donde se sitúa el petardo es recomendable situarlo sobre una base antivibratoria. A diferencia de otras fuentes de ruido, debe tenerse en cuenta que se genera el residuo del propio cartucho del petardo y se pueden desprender algunas partículas de pólvora. Se debe tener en cuenta, entonces, en qué tipo de recinto industrial se utilizan los petardos como fuentes de ruido.
Como ventajas, se tratan de fuentes de fácil transporte y pueden producir altos niveles de presión sonora. Sin embargo, la repetitividad que ofrecen es inferior a la del método interrumpido ya que por ejemplo, dos petardos de la misma clase pueden no explotar igual, excitando de forma ligeramente distinta el rango frecuencial evaluado.
Para ver otro tipo de fuente de ruido impulsivo puedes visitar nuestro artículo “origami banger“