Actualmente podemos encontrar en el mercado productos de pintura que prometen ofrecer un aislamiento elevado. Particulares afectados por el ruido de vecinos y ruido exterior ven en este material un milagro para sus problemas pero nada está más lejos de la realidad.
La pintura no puede considerarse un material aislante
El aislamiento acústico de un material puede definirse como su oposición a vibrar cuando en él inciden ondas sonoras. La energía sonora incide, por ejemplo en una pared, la hacer vibrar y parte de la energía es transmitida y parte es reflejada.
La facilidad u oposición de una pared a vibrar depende de las características de composición como su masa, elasticidad, forma, etc. A mayor masa, mayor será el aislamiento ya que la atenuación que sufrirán las ondas sonoras incidentes en la pared será mayor.
Existen en el mercado pinturas que prometen un aislamiento de 52dB u otros que prometen mejoras de aislamiento de entre 3 y 7 dB. Cabe tener especial cuidado y no dejarse engañar o confundir. Para hacernos una idea, un aislamiento de 52dB lo proporcionaría una pared de bloque de hormigón prefabricado de 19cm. En el caso de especificar la mejora de aislamiento acústico que ofrecen, se debe especificar siempre sobre el paramento base donde se ha ensayado.
Si el elemento base tiene masa elevada, la mejora de aislamiento que un material específico ofrecerá sobre él será menor que el que ofrecería sobre un elemento más ligero.
Pongamos el caso de un revestimiento con pintura. En el mercado encontramos que la densidad máxima que pueden alcanzar es similar a un enlucido de yeso (1070kg/m3) donde se realizan dos capas pudiendo llegar a un espesor total de entre 25-35mm. Sería el equivalente a un doble enlucido de espesor habitual de 15mm.
Para paredes de alta densidad y elevado espesor como el bloque de hormigón prefabricado de 19cm el incremento que proporcionarían dos capas de pintura de estas características sería nulo. En el caso de un tabique (que nos ofrezca inicialmente un aislamiento de 33dB) nos proporcionaría un aislamiento extra de 1dB. Está claro, entonces, que las pinturas no pueden considerarse aislantes ya que pueden ofrecer el mismo aislamiento que un enlucido de yeso. Por lo tanto es prácticamente imposible conseguir una mejora de aislamiento de 7dB con una simple pintura.
A la hora de aislar un local hay que tener en cuenta que entre un recinto emisor y un recinto receptor existen varios caminos de propagación que influyen en el aislamiento global entre ambos recintos. No solamente influye el paramento divisorio sino que también influyen las vías de transmisión secundarias, llamadas flancos. Pongamos el ejemplo de la figura siguiente donde el paramento divisorio es una pared. El sonido puede transmitirse, aparte de por la pared divisoria, por las otras paredes del recinto, por el techo y por el suelo. El orden de importancia de cada uno de los caminos de propagación vendrá definido por la composición de cada paramento y la unión entre ellos.
Imagen extraída de la norma de cálculo UNE EN ISO 12354-1.
El paramento divisorio es la vía de transmisión principal entre recintos pero en muchos casos no hay suficiente con aislar el paramento divisorio para obtener el aislamiento necesario y se requiere tratar los flancos
Para determinar que vías secundarias son las que más afectan a la propagación del ruido debe realizarse un estudio acústico exhaustivo. En dBplus consultores acústicos realizamos mediciones acústicas y estudios acústicos para todo tipo de locales como bares, restaurantes, gimnasios, oficinas, centros de culto, discotecas, bares musicales, etc. Determinamos los caminos de propagación entre espacios emisores y recintos afectados diseñando de esta forma las soluciones óptimas.
Para ganar aislamiento acústico no debemos recurrir a nuevos materiales que prometen cosas imposibles y debemos ponernos en manos de especialistas acústicos que puedan aconsejarnos sobre las soluciones constructivas que mejor se adapten a cada caso particular.